Novena a Ntra. Sra. de la "O" y el Divino Niño

"La espera alegre de la venida del Salvador que se ha hecho hombre, semejante a nosotros, llene nuestros corazones de esperanza y de paz".

Llenos de esa esperanza y de paz ofrezcámosle una Novena a Ntra. Sra. de la "O" y el Divino Niño.

Bendiciones de Adviento en nuestros hogares

Desde que inauguramos el Adviento con la Corona, venimos preparándonos para bendecir este nacimiento, donde cada imagen nos lleva a través del tiempo y la imaginación, a Belén donde nació Jesús. 

Con los Ángeles le cantaremos; con San José y la Virgen le acunaremos y le cuidaremos; con los pastores le llenaremos de regalos, de besos y obras buenas; y, con los Reyes magos, nos postraremos para obedecerle como a nuestro Rey, amarle como a nuestro hermano y adorarle como nuestro Dios.

Domingo III de ADVIENTO. "Estad siempre alegres".


LA CORONA DE ADVIENTO

La corona de Adviento es la fórmula más habitual y más sencilla de ir iniciando los domingos de Adviento. Y nuestras moniciones como, en otros años, irán reflejando ese hecho. La corona de Adviento tiene cuatro velas de colores diferentes y cada domingo de Adviento se enciende una. En el caso del primer domingo de encenderá la primera y las demás quedarán apagadas. Cuando lleguemos al segundo domingo de Adviento, antes de iniciarse la Eucaristía, ya estará encendida la vela del domingo anterior y, por tanto, se encenderá la segunda. Haremos lo mismo con la tercera y la cuarta. En caso de la tercera, iniciaremos la celebración con las dos velas anteriores ya encendidas y prenderemos la tercera. Para la cuarta, antes de comenzar ya estarán encendidas las tres y completaremos la corona con la cuarta vela encendida.

MONICIÓN DE ENTRADA

Queremos comunicaros la máxima alegría en nuestra bienvenida a la Eucaristía de hoy… “Estad siempre alegres en el Señor, os lo repito: estad siempre alegres. El Señor está cerca”. Nos lo dice San Pablo en la monición de entrada de la Eucaristía. Es una frase de capítulo cuarto de la Carta a los Filipenses. Por tanto este tercer domingo de Adviento tiene un mandato muy claro, desde el principio de la liturgia de hoy: que estemos alegres porque el Señor se acerca. Es un buen resumen, es una buena indicación para nuestro comportamiento para los próximos días. El tiempo de Navidad se acerca y hemos de estar preparados para ese momento. La alegría es un gran ingrediente para nuestra espera y para toda nuestra vida.

AUDIENCIA GENERAL, 12/12/2012. "Dios está presente en la historia".

AUDIENCIA GENERAL
Miércoles 12 de diciembre de 2012. Sala Pablo VI


Queridos hermanos y hermanas:

Hoy quiero meditar sobre las etapas de la Revelación, que se nos muestran en las Escrituras y que tienen su culmen en el adviento de Nuestro Señor según la carne. El Evangelio que hemos escuchado nos lo recuerda: «Se ha cumplido el tiempo y está cerca el reino de Dios». Desde Cristo, la historia se ilumina, mostrándonos una presencia que le da significado y la abre a la esperanza. La Palabra de Dios nos invita a hacer memoria de los hechos narrados en ella, a verlos como «historia de la salvación».

Benedicto XVI: "El ADVIENTO nos recuerda que Dios sigue en el mundo".


Las etapas de la Revelación, señaladas en las Escrituras y que culminan en el Adviento de Jesús, han sido el tema de la catequesis de Benedicto XVI durante la audiencia general de los miércoles que ha tenido lugar en el Aula Pablo VI. En el Año de la Fe el Papa ha renovado la invitación a leer más a menudo la Biblia y a prestar atención a las lecturas de la misa dominical subrayando que todo ello constituye “un alimento inapreciable para nuestra fe”.

Domingo IV de Adviento. El Domingo de la Anunciación (18/12/2011)


El domingo de la Anunciación

Llegamos al Cuarto Domingo de Adviento que nos trae como relato principal la bellísima escena de la Anunciación, cuando el arcángel Gabriel anuncia a María de Nazaret que ha sido elegida por Dios para llevar en su seno al salvador del mundo. Durante siglos todos los cristianos se han postrado ante la belleza, emoción y grandeza de dicha momento.

Adviento: tiempo para acoger al Hijo que humaniza nuestra carne,


De ahí que, para hacerse hijo de Dios, el hombre no tenga que despreciar su condición carnal, sino que ha de acoger al Logos que se le manifiesta en el hombre Jesús. Adviento es contemplar al detalle ese «renuevo del tocón de Jesé» y dejar enamorarse por su estilo. Ese no juzgar por apariencias, ni sentenciar de oídas, sino cuidar con esmero a pobres y desamparados (cfr. Is 11,1-11). Es decir, Adviento es desalojar «nuestras inhumanidades». Más tarde vendrá el contemplar muy de cerca su nacimiento, su vida, estilo y muerte, para así irnos «transformando en su imagen con resplandor creciente» (2 Cor 3,18).

Domingo II de Adviento (04/12/2011).


El Domingo de Juan Bautista

La liturgia de este Domingo Segundo de Adviento se centra muy especialmente en Juan Bautista, en el Precursor. Lanza su grito desde el desierto para la gente allane sus almas y sus corazones en espera del Mesías, de quien viene a arreglarlo todo. El mensaje del Bautista es muy válido para nosotros hoy pues además de enseñarnos austeridad y moderación nos pide –casi nos exige—que nos convirtamos, que abramos nuestros ojos a la esperanza total que supone que un Dios de hace Hombre y viene a salvarnos.

ADVIENTO. La vida, compartida, es más!

Vendrá a nosotros la PALABRA!


Conocemos tres venidas del Señor. Además de la primera y de la última, hay una venida intermedia. Aquéllas son visibles, pero ésta no. En la primera el Señor se manifestó en la tierra y vivió entre los hombres, cuando -como él mismo dice- lo vieron y lo odiaron. En la última contemplarán todos la salvación que Dios nos envía y mirarán a quien traspasaron. La venida intermedia es oculta, sólo la ven los elegidos, en sí mismos, y gracias a ella reciben la salvación.

Domingo I de Adviento. Ciclo B (27/11/2011).


LA CORONA DE ADVIENTO

La corona de Adviento es la fórmula más habitual y más sencilla de ir iniciando los domingos de Adviento. Y nuestras moniciones como, en otros años, irán reflejando ese hecho. La corona de Adviento tiene cuatro velas de colores diferentes y cada domingo de Adviento se enciende una. En el caso del primer domingo se encenderá la primera y las demás quedarán apagadas. Cuando lleguemos al segundo domingo de Adviento, antes de iniciarse la Eucaristía, ya estará encendida la vela del domingo anterior y, por tanto, se encenderá la segunda. Haremos lo mismo con la tercera y la cuarta. En caso de la tercera, iniciaremos la celebración con las dos velas anteriores ya encendidas y prenderemos la tercera. Para la cuarta, antes de comenzar ya estarán encendidas las tres y completaremos la corona con la cuarta vela encendida.

Tiempo de Adviento. "El SENTIDO del Adviento".

EL SENTIDO DEL ADVIENTO

«El Adviento y la Navidad han experimentado un incremento de su aspecto externo y festivo profano tal que en el seno de la Iglesia surge de la fe misma una aspiración a un Adviento auténtico: la insuficiencia de ese ánimo festivo por sí sólo se deja sentir, y el objetivo de nuestras aspiraciones es el núcleo del acontecimiento, ese alimento del espíritu fuerte y consistente del que nos queda un reflejo en las palabras piadosas con que nos felicitamos las pascuas. ¿Cuál es ese núcleo de la vivencia del Adviento?

Tiempo de Adviento. "El significado del Adviento".

EL CICLO DE NAVIDAD. TIEMPO DE ADVIENTO 

¿QUE ES EL ADVIENTO?

1. Significado del Adviento. "En el sagrado tiempo de Adviento la Iglesia despierta en nuestra conciencia el recuerdo de los pecados que tristemente cometimos; nos exhorta a que, reprimiendo los malos deseos y castigando voluntariamente nuestro cuerpo, nos recojamos dentro de nosotros mismos con piadosas meditaciones, y con ardientes deseos nos movamos a convertirnos a Dios, que es el único que puede, con su gracia, librarnos de la mancha del pecado y de los males, que son sus consecuencias."


Tiempo de Adviento. "Cómo hacer una Corona de Adviento".

La corona o guirnalda de Adviento es el primer anuncio de la Navidad. Desde nuestra Parroquia queremos enseñaros como hacer una Corona de Adviento.

Para ello necesitaremos los siguientes materiales:
  • 1 corona de 20 cms de diámetro de abeto artificial
  • 2 varas de bolitas doradas
  • 4 angelitos para colgar en el árbol
  • 4 velas roja, verde, blanca y morada
  • Moños de cinta roja

Ángelus, 19/12/2010. IV Domingo de Adviento.

Ángelus / Regina Coeli
Domingo 19 de diciembre de 2010.


Benedicto XVI: "San José es el hombre justo, fiel a la ley de Dios".


"San José anuncia los prodigios del Señor, testimoniando la virginidad de María, la acción gratuita de Dios, y custodiando la vida terrena del Mesías. Por lo tanto, veneramos al padre legal de Jesús, porque en él se perfila el nuevo hombre que mira al futuro con confianza y valor, no persigue el propio proyecto, sino que se confía totalmente a la infinita misericordia de Aquél que cumple las profecías e inaugura el tiempo de la salvación". En este cuarto domingo de Adviento, mientras todo habla de amor y la preparación a la Navidad se vuelve más intensa, Benedicto XVI ha abordado el nacimiento de Jesús desde el punto de vista de san José.

"Dios con nosotros". (Domingo IV de Adviento)

“Ved que la Virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel”, que traducido significa:  “Dios con nosotros.”

Evangelio del día (Mt 1, 18-24)

Domingo IV de Adviento. Ciclo A. (19/12/2010)


MONICIÓN DE ENTRADA

Os deseamos la más cordial alegre bienvenida a la Eucaristía del IV Domingo de Adviento. Es ya el último de este tiempo de espera y esperanza. Pero todavía quedan unos días… En la noche del viernes iniciaremos la Nochebuena y el próximo sábado ya es Navidad. Debemos tener el ánimo bien abierto a la gran realidad que nos llega: Dios se hace Niño para salvarnos. Hemos encendido la cuarta vela de Adviento –que es también la última—con la esperanza de que estas cuatro luces prendidas nos abran a la conversión de nuestros corazones, pues ya falta poco tiempo para la venida del Señor. Hoy, además, tenemos un protagonista muy especial: a José, a nuestro San José. Y veremos como un ángel borró toda su inquietud y él supo, que gracias a su esposa, María, iba a ser padre adoptivo de un Niño que era Dios. Y Salvador del mundo. Gran día, hoy, para todos nosotros. Iniciemos felices, alegres y esperanzados nuestra Eucaristía.

Ángelus, 12/12/2010. III Domingo de Adviento.

Ángelus / Regina Coeli
Domingo 12 de diciembre de 2010.


ÁNGELUS, 12/12/2010 (Plaza de San Pedro)
III Domingo de Adviento

Queridos hermanos y hermanas:

La luz de la verdad cambia el mundo, no las ideologías

No es la violenta revolución que cambia al mundo, sino la silenciosa luz de la verdad, signo de la presencia de Dios, que nos da la certeza que somos amados y no somos el producto de un azar sino de una voluntad de amor”. 
Lo dijo el Papa esta mañana celebrando la misa del III Domingo del Adviento en la parroquia romana de San Maximiliano María Kolbe en Prato Fiorito, en la vía Prenestina. Una parroquia de la periferia como muchas de las diez hasta ahora visitadas por Benedicto XVI en su pontificado, con una iglesia nueva, dedicada en abril del 2009 al santo franciscano polaco, mártir en el campo de concentración de Auschwitz. Un santo que es una luz, como el Padre Mariano de Veuster y la Madre Teresa de Calculta, en el camino de luz llevado por Cristo en el mundo, no con el poder sino con la fuerza de la humildad y del amor. En los últimos dos o tres siglos, explicó el Papa comentando el evangelio de Mateo y la pregunta de Juan el Bautista a Jesús, “¿eres tú quien debía venir o tenemos que esperar a otro?”, han venido tantos profetas, ideólogos, dictadores, que ha dicho “¡no es él! no ha cambiado el mundo” y que han creado sus totalitarismos que han cambiado el mundo de manera destructiva, y al final lo que ha quedado es un gran vacío y destrucción. 

Enlaces Parroquiales

Parroquia San Gines de Padriñan. Comunidad Parroquial.

"TRANSFORMANDO EL MUNDO HACIENDO IGLESIA"