Respondamos a Dios, que nunca se cansa de amarnos, con nuestro amor a Él y al prójimo. Exhortando una vez más a la esperanza - en particular, ante las graves emergencias naturales y sociales, como la violenta criminalidad- Benedicto XVI alentó a perseverar en el testimonio de Cristo y en su amistad. En Lamezia Terme, en la región de Calabria, en el sur de Italia, el Papa presidió la Santa Misa y dirigió el rezo del Ángelus, en el marco de su visita pastoral, con el lema: “En el nombre de Jesucristo el Nazareno, ¡anda!”.
En este XXVIII domingo del Tiempo Ordinario, dirigiéndose a los queridos hermanos y hermanas de esta tierra que conoce tantas dificultades, el Santo Padre les expresó su gran gozo por poder compartir con ellos el pan de la Palabra de Dios y de la Eucaristía; así como su alegría por estar, por primera vez, en Calabria y encontrarse en la Ciudad de Lamezia Terme.