ESTADO Y PROCESIÓN PENITENCIAL
La Iglesia de San Anselmo - BASÍLICA DE SANTA SABINA AVENTINE
Miércoles de Ceniza, 09 de marzo 2011.
“Nuestro mundo necesita ser convertido por Dios, necesita su perdón, su amor, necesita un corazón nuevo”. Lo ha subrayado Benedicto XVI, al presidir en la Basílica de Santa Sabina la misa del Miércoles de Ceniza. Una ceremonia sugerente, precedida por la procesión penitencial desde la Basílica de San Anselmo, que brindó al Papa la ocasión de reafirmar que “Dios es rico en misericordia”, una misericordia regeneradora que “renueva en la intimidad un espíritu quieto, restituyéndonos la alegría de la salvación”.