Benedicto XVI, con la ciencia y el saber (JMJ).

Se encontrará con mil jóvenes profesores universitarios durante la JMJ

Cerca de 1.000 jóvenes profesores universitarios tendrán un encuentro con el Santo Padre en el marco de la Jornada Mundial de Madrid.  Los profesores universitarios han recibido esta invitación con enorme ilusión. Así lo cuenta Antonio Alonso, profesor de relaciones internacionales, en la universidad CEU San Pablo: “Al saber que el Papa quería reunirse con nosotros he sentido una gran alegría y un fuerte deseo de ser uno de los afortunados”. 

El Santo Padre es consciente de nuestra especial misión, ya que él mismo fue profesor universitario y sabe que por nuestras manos pasan una buena cantidad de jóvenes cada año que se están empapando de conocimientos, pero también de valores”, ha comentado Alonso. 

El encuentro se celebrará en la Basílica del Monasterio de El Escorial, situada a las afueras de la ciudad de Madrid. “Tanto la historia del monasterio como su realidad actual es en sí misma, una preciosa síntesis entre razón y fe. Es un lugar de gran belleza artística formado por un centro universitario unido a una comunidad religiosa, lo cual indica la unión del estudio con la espiritualidad”, ha resaltado Carla Díaz de Rivera, directora del departamento de Cultura de la Jornada Mundial. 

Nadie duda que Benedicto XVI es un gran enamorado del mundo universitario y un gran defensor del diálogo entre la fe y la razón. En Westminster Hall en su visita a Reino Unido en septiembre de 2010, Benedicto XVI afirmó: “La religión no es un problema que los legisladores deban solucionar, sino una contribución vital al debate nacional. (…) La reciente crisis financiera ha mostrado claramente la ineficacia de soluciones pragmáticas y a corto plazo. ¡Toda decisión económica tiene un carácter moral!”. El Santo Padre también ha tenido encuentros con personas del mundo académico y de la cultura en Ratisbona (Alemania) en 2006 y  en el Collège de los Bernardins (París) en 2008. 

Sin perder el norte: el servicio a la sociedad

Los retos a los que se enfrenta un profesor universitario son numerosos. Carmen LLovet, 29 años, profesora de moda y comunicación, en un centro adscrito a la Universidad Complutense de Madrid afirma que uno de los principales desafíos es alentar a los alumnos a formarse para ser los mejores profesionales de su ámbito, con el fin de contribuir a la sociedad.  “Ante un ambiente donde el trabajador es sólo un medio para alcanzar un fin económico, el católico contrasta. No vive solo para trabajar: su horizonte es servir a la sociedad”, ha resaltado.

Carmen Llovet, a la derecha, con dos de sus alumnos.

Y los primeros en dar ejemplo deben ser los propios profesores. Así lo cree María, profesora en la Universidad Carlos III de Madrid, quien afirma que un profesor que sea católico debe notarse no sólo en que “es buen profesor, que realice un buen trabajo, sino también porque es honrado, está atento a las necesidades de sus alumnos y sus colegas… Sólo así podrá reflejar a Cristo.” 

Muchos de los profesores entrevistados subrayan que al repasar los códigos éticos de sus respectivas profesiones, ven que lo recogido allí son virtudes cristianas: el compromiso con la verdad sin condiciones, la generosidad que va más allá de la justicia, la lealtad a las personas y a la palabra dada… En esta línea Mar Cuadrado, profesora en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Navarra, ha afirmado que formar a los futuros médicos en actitudes como la solidaridad o la tenacidad es clave: “Por ejemplo, se va a celebrar en el campus de la universidad Solidarium, una feria con diferentes propuestas de voluntariado para el curso académico y para el verano. Yo he animado a mis alumnos a sumarse a estas iniciativas, creo que les aportarán mucho en el desempeño de su profesión”. 

Un millón de retos en la moda, la ciencia y la economía

Estar presente en todos los campos del saber, y en cada uno de ellos aportar una visión cristiana y más humana es el objetivo de estos jóvenes profesores. Inés, que es profesora e investigadora en el ámbito de la economía en una universidad pública madrileña, dice: “Creo que siempre se puede influir ‘en cristiano’, a  través de la profesionalidad. En la investigación con una actitud de búsqueda de la verdad, presentando un trabajo contrastado y riguroso y basado en una antropología cristiana, esto es, basado en una concepción de ‘persona’ y no de ‘máquina’ ”.

Mar Cuadrado cuenta el día a día en sus clases de embriología y anatomía: “Mi trabajo en el aula me da para explicar miles de temas relacionados con la vida desde sus inicios. Creo que es importante que los alumnos no aprendan sólo la teoría sino que lo vean, que vean cómo desde las primeras semanas el cuerpo humano está formado y sólo le queda madurar. ¡Cuando ven esto con sus propios ojos, en embriones reales, son los propios alumnos los que te sacan el tema del aborto… y se dan cuenta que es acabar con una vida humana!”. 

 Además de profesora en la universidad, Mar forma parte de un equipo de investigación en el Centro de Investigación Médica Aplicada de la Universidad de Navarra (CIMA) que se dedica a investigar terapias para mejorar la memoria en pacientes con Alzheimer. “¡Requiere dedicar muchas horas, pero cuando tienes en mente a cuántas personas puedes ayudar, la dedicación es gustosa!”, reconoce.

Fachada de la Basílica del Monasterio de El Escorial.
También es clara la aportación de un cristiano en el ámbito de la moda y la belleza. Un ejemplo concreto nos lo da Carmen Llovet: “Los informes psicológicos señalan la baja autoestima que las mujeres tienen por reducir su belleza a un aspecto físico. Si nadie se define exclusivamente por su aspecto físico, ¿por qué los medios lo hacen?.El católico conoce la belleza interior, la que se refiere a los más hondo y perdurable -no a tendencias que pasan. Es necesario que en las universidades se propicie un diálogo sobre cuestiones como éstas que tanto condicionan el desarrollo académico y personal. En Harvard ya lo están haciendo, de la mano de una conocida marca de cuidado personal”, resalta Llovet.  

En 1982, con Juan Pablo II

Juan Pablo II tuvo un encuentro similar como el que se celebrará en Madrid, en su visita a España en 1982. Allí habló a personas del mundo académico sobre que “una fe que no se hace cultura es una fe no plenamente acogida, no totalmente pensada, no fielmente vivida”. Muchos universitarios acudieron a saludarle, a ellos les recordó que el espíritu universitario, es sinónimo de apertura, búsqueda, investigación… “Sé que en vuestra generosidad de jóvenes, no os satisfacen tantas cosas de nuestra sociedad actual, que desearíais más justa y solidaria”. 

Juan Pablo II les animó a apoyarse en el Señor, y así “ser capaces de enfrentaros sin temor ante el futuro, empeñados en construir la utopía de un mundo nuevo, más justo y humano”.

Fuente: JMJ 2011.

Enlaces Parroquiales

Parroquia San Gines de Padriñan. Comunidad Parroquial.

"TRANSFORMANDO EL MUNDO HACIENDO IGLESIA"